ATLANTA, GA (Junio 5) – Los concesionarios de carros en EE.UU de todo el país presentaron una demanda el pasado lunes contra el fabricante de carros y camionetas Mahindra & Mahindra, Ltd., quien es el principal dueño de SSANGYONG, por fraude, tergiversación y conspiración. La demanda alega que Mahindra embaucó a cientos de concesionarios de carros norteamericanos y se marchó con secretos comerciales y con más de $60 millones de dólares en efectivo. Mahindra simplemente incumplió sus promesas, afirma el abogado Michael Díaz, socio gerente de la firma con sede en Miami Diaz Reus & Targ, y quien dirige el equipo de abogados de los demandantes conformado por Gary Davidson y Brant Hadaway.
“Mahindra le dijo a los concesionarios que sus camionetas y SUV estaban listas para ser entregadas en el mercado norteamericano,” dijo Díaz. “Sin embargo, Mahindra intencionalmente demoró la certificación de sus vehículos con el fin de obtener pagos de los concesionarios, de conocer sus secretos comerciales y de comenzar a buscar otros socios en los Estados Unidos y en otros lugares, en una clara violación de sus compromisos.”
La demanda masiva por responsabilidad extracontractual fue presentada ante el Tribunal del Distrito de los Estados Unidos en Atlanta (#KH199170-3) en junio 4 en contra de Mahindra & Mahindra, Ltd, y Mahindra USA, Inc. por concesionarios de carros en New Hampshire, Florida, California, New Jersey, y Washington. Los concesionarios de carros de todo el país pagaron los honorarios iniciales de la concesión, adelantaron gestiones de mercadeo en nombre de Mahindra, construyeron salas de exposiciones y ventas para Mahindra, exhibieron plataformas y vitrinas, y contrataron personal adicional, todo esto a insistencia de Mahindra, según se explica en la demanda.
“A través de sus falsas representaciones, los demandados hicieron que los concesionarios norteamericanos hicieran inversiones y promocionaran la marca Mahindra,” dijo Díaz. “Mahindra va a aprender que tratar con los sagaces concesionarios de carros fue un serio error, pues nosotros buscaremos agresivamente que se haga justicia con nuestros clientes.”
De conformidad con lo señalado en la demanda, Mahindra comenzó a preparar el terreno para entrar en el mercado de los Estados Unidos y a construir una red de concesionarios en todo el país en el 2004. En un movimiento de alto perfil para cortejar a los concesionarios norteamericanos, Arun Jaura, un alto ejecutivo de Mahindra, asistió al show de automóviles en Atlanta en el 2007, donde repetidamente proclamó, “Yo Amo America!”
En ese show, al que asistieron más de 400 concesionarios norteamericanos, los ejecutivos de Mahindra presentaron videos promocionales en los cuales se mostraban las camionetas recorriendo diferentes tipos de terrenos; resaltando así la durabilidad de sus vehículos. Jaura también informó que el tiempo estimado para la introducción de la camioneta de cuatro puertas a los Estados Unidos era al final del 2008, y que la camioneta dos puertas y la SUV entrarían hacia el tercer bimestre en el 2009.
El lanzamiento de Mahindra fue muy exitoso. A la larga, obtuvo $9.5 millones de dólares en pagos de los concesionarios, de conformidad con lo señalado en la demanda. A través de una avalancha de comunicados de prensa, lanzamientos de venta, publicidad, y artículos de prensa orquestados por Mahindra, los comentarios de Jaura fueron posteriormente usados para hacer que más distribuidores estuvieran de acuerdo en vender los vehículos de Mahindra.
Durante los dos años siguientes, Mahindra continuó garantizando a los concesionarios norteamericanos que el proceso de certificación era un objetivo, cuando de hecho se estaba demorando la presentación de la documentación a las entidades reguladora como un pretexto para terminar sus acuerdos, dijo Díaz.
“Mahindra incumplió repetidamente sus obligaciones,” explicó Diaz. “Después de haber gastado millones de dólares en nombre de Mahindra, los concesionarios norteamericanos no obtuvieron nada diferente a su esfuerzo y energía que una serie de falsas promesas.”
Acerca de Diaz Reus
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