La relación con la organización criminal a la que el gobierno de EEUU ligó a Nicolás Maduro y el cártel mexicano habría iniciado en los años noventa gracias a negociaciones hechas por enviados de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.
El cártel de Sinaloa y el cártel de los Soles en Venezuela encontraron desde finales de los años noventa una ruta segura que les permite traficar drogas desde Colombia a Estados Unidos, así lo señaló el ex director de Operaciones Internacionales de la DEA (Agencia Antidrogas Estadounidense), Mike Vigil.
Vigil aseguró que desde finales de los noventa, el fundador del cártel de Sinaloa, el narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, entró en contacto con la organización criminal ligada al chavismo, gracias a que en su territorio los cárteles colombianos operan de manera segura e incluso, algunos grupos como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) encontraron protección.
“Muchos de los cárteles colombianas, en especial las FARC, estaban protegidos en Venezuela, mucho más que en Colombia, y pusieron bases protegidos por el gobierno y luego, inicialmente, el gobierno venezolano les pagaban para que voltearan su cabeza al otro lado. Ahora, el cártel de los Soles está tomando una manera más activa en el tráfico: controlan el movimiento de la cocaína a través de sus socios mexicanos”, dijo en en entrevista con Infobae México.